Los masai, una sociedad con múltiples danzas, ceremonias y fiestas que dejan de entredicho la alegría de las personas, a pesar de las penurias sociales, políticas y territoriales con las que tienen que enfrentarse en la actualidad.
Cultura masai.
Para comenzar a desgranar lo que significa la cultura masai, se debe saber que son un pueblo que está conformado por aproximadamente 830.000 personas que se concentran en Kenia Meridional además de en Tanzania.
Su idioma recibe el nombre de maa, una lengua de tipo nilotica oriental aunque hoy en día muchos de ellos pueden mantener cualquier conversación en idioma suajili e inglés.
A pesar de que muchas de las personas que conforman la comunidad masai se han convertido al cristianismo y se han decantado por tener una religión católica, la mayoría de las personas aún mantienen su religión milenaria, conservando sus costumbres y tradiciones.
Antes de que llegara el proceso colonizador eran un pueblo de guerreros que se dedicaba a depredación. Hoy en día se forman para ser pastores de Bóvidos, ovejas y cabras, animales y práctica donde recae su riqueza y economía.
Generalmente viven en unos asentamientos a los que llaman “manyata”, conformados por varias cabañas dispuestas en círculos, estas se hacen con ramas y se rodean con paja para a su vez rodear y proteger al rebaño.
Al estudiar du cultura nos damos cuenta que está llena de celebraciones y fiestas que empiezan desde el nacimiento de un nuevo miembro de la comunidad. Los masai dividen su vida y los grupos de edad en niñez, guerrero menor o también conocido como moran, guerrero mayor, adulto menor y adulto mayor.
Al ir haciéndose mayor cada grupo de hombres forma parte de un grupo que pasa por una etapa generacional hasta ocupar todos los grados de edad correspondientes. Después de hacerles la circuncisión a los varones, estos se convierten en hombres y guerreros menores.
Anteriormente todos los niños debían cumplir con la prueba de cazar y matar a un leo para ser considerados adultos. Hoy en día, esta tradición se ha perdido pues los leones están en peligro de extinción y son una especie protegida.
Tienen un sistema político y social que no se basa en el centralismo, puesto que para decidir sobre los asuntos generales que conciernen a toda la aldea se convoca a reuniones de ancianos y discusiones públicas.
Costumbres masai.
Esta población se suele reunir para vivir en aldeas o poblados que se llaman “enkang”, constituidos por casas que tienen forma de iglú aunque no son más altas que un metro y medio; estas casas se llaman bomas.
Para formarlas primero se hace una estructura base usando ramas que después se recubren con paja y excremento de vaca. Para proteger el poblado se hace una valla usando troncos y ramas. En la parte interior de la aldea o campamento se construye otra valla que sirve para mantener el ganado en un solo sitio.
Suelen usar vestidos hechos con tejidos de algodón en tonos brillantes de color rojo y lila. Su atuendo lo forman unas mantas finas que usan alrededor del cuerpo, asemejándose en cierta manera a un vestido con un hombro descubierto.
Las danzas constituyen un elemento común en el tiempo libre de esta sociedad. Para bailar lo hacen formando círculos y entre 2 y 3 hombres entran en el círculo para dar saltos y bailar al ritmo de los instrumentos.
Las mujeres en los bailes mueven las cabezas hacia adelante y hacia atrás, a la vez que siguen el ritmo de los tambores y pueden usar hasta una docena de collares.
Son dos los instrumentos que tienen y usan los masáis, siendo estos muy importantes dentro de las danzas que ejecutan, se tratan de los tambores y unos pianos o por lo menos una versión que se le parece.
Los tambores se hacen usando madera, mientras que la base donde se usan las manos para que el instrumento suene se hace de cuero de animales tensados.
Los pianos pueden ser hechos a partir de un caparazón de tortuga vacío, si se quiere uno grande. A este se le anexa una plataforma de madera y unos pedazos de hierro que cuando se pulsan transmiten una nota musical.
También se pueden estos pianos más pequeños pero sin usar el caparazón de las tortugas.
Durante los rituales y las celebraciones, las masai deben usar sus mejores trajes hechos con los mejores tejidos, mientras que las mujeres se atavían con muchos collares, pulseras y pendientes.
Organización social de los masai.
Dentro de la sociedad de los masai hay una clara división de grupos según las edades que son niños y niñas, jóvenes y adolescentes y adultos. Los adultos a su vez se dividen en hombres y mujeres además de si tienen hijos o no.
Se puede apreciar un sistema social un tanto difícil de entender para las civilizaciones occidentales. Primero que nada, los hombres se consideran dueños de las mujeres, pudiendo tener más de una y tantas como quisiera y le permita su riqueza.
Las mujeres suelen costar tres vacas, dos ovejas y un buey. Si un hombre es lo suficientemente rico puede llegar a tener un máximo de 20 mujeres, aunque la mayoría solo tiene 5.
Una sociedad un tanto machista ¿no crees? pero las mujeres no están atadas a un solo hombre, es más pueden llegar a tener relaciones sexuales con cualquier hombre de la tribu, siempre y cuando este sea su deseo y el encuentro no sea forzado.
Si llega a pasar que un hombre obliga a una mujer a tener sexo, esta puede arremeter contra el para matarlo y si se presenta el caso en que el agresor escape es su ganado el que será sacrificado y repartido como alimento.
Los masai contraen matrimonio fuera de su propia tribu para no tener problemas consanguíneos en su descendencia. En caso de que un hombre sea incapaz de tener hijos, otros hombres de la tribu deben encargarse de embarazar a su mujer, aunque no pueden reclamar estos niños como suyo.
Desde el momento en que una mujer se embaraza no puede tener más relaciones sexuales, pero no solo hasta que él bebe nazca, sino hasta que sea capaz de caminar. El momento del parto se atiende en la cabaña donde vive la mujer, donde el hombre tiene prohibido entrar hasta que no hayan pasado 10 días luego del alumbramiento.
Hasta que el niño comience a caminar, el padre no puede comer en casa. Él bebe debe ser bendecido por un hombre sabio de la aldea; para hacerlo este debe escupir sobre la cabeza o pecho de bebe.
A los niños se les asigna el trabajo de vigilar el ganado a la vez que las mujeres tienen múltiples tareas como ordeñar los animales, barrer, limpiar tanto las casas como el campamento y revestir nuevamente el techo de la casa cuando el sol hace alguna grieta.
El tiempo libre de las mujeres lo gastan elaborando collares y adornos usando perlas de todos los colores.
Hay una figura que se denomina como “Laibon”, que puede traducirse como profeta; este es la persona que se comunica entre la divinidad Ngai, también llamada Enkai, Nkai, Engai, y el pueblo masai.
Este cargo pasa de generación en generación y se ve reducido a un grupo de personas muy pequeño. Tiene el poder y la capacidad para ser juez y predecir el futuro. Es también la persona encargada de preceder las ceremonias, así como también asegurar la fertilidad, autorizar las guerras, traer las lluvias y un oficio muy importante, de dar consejos a los moran.
Los masáis se llaman a sí mismo una comunidad guerrera, por lo que dentro de la tribu existe la figura de los “moran”. Hombres que se conforman su propia comunidad donde todo es compartido, y se dedican solo a la lucha y el robo, generalmente de ganado.
Los moran son acompañados por sus madres durante el día, quienes se dedican a cocinarles, siendo reemplazadas durante las noches por sus amantes. Deben pasar entre 14 y 20 dentro de esta comunidad antes de que puedan casarse, a menos que un sabio conceda una excepción a un valiente por su gran valor.
Estos hombres tienen prohibido consumir alcohol y oler tabaco, por lo que el único estimulante que pueden tener antes de entrar en batalla es masticar la corteza del árbol de la mimosa.
Mujer masai.
Dentro de la organización social que tienen los masai, la mujer tiene un papel que si bien es muy importante muchas veces viene acompañado de una serie de tratos y situaciones que cualquiera podría considerar injustas e intolerable.
Las relaciones entre los hombres y mujeres se dan de una manera que cualquiera puede considerar pintoresca y curiosas, pues estas relaciones se llevan bajo el concepto patriarcal donde pueden gozar de ciertas concesiones.
El matrimonio de las mujeres se apalabra cuando estas todavía toman del pecho de su madre, siempre poniendo como prioridad los diversos intereses materiales, económicos y estéticos.
Aunque si bien es cierto que tiene la libertad de tener relaciones sexuales antes de casarse y siempre que viva en el clan de su padre, a las jóvenes señoritas se les practica la ablación, bajo la primicia de ayudarlas a que sean válidas para el casamiento y la procreación.
Cuando el hombre desea casarse con una mujer, este usa unas campanillas que hace sonar tantas veces como cabezas de ganado tenga su padre. La dote de la mujer se conforma con tres vacas, dos ovejas y un buey, los cuales debe cuidar luego de una breve instrucción.
La ganadería es tan importante dentro de la sociedad masai que un hombre puede sentir y profesar mayor amor hacia sus bueyes que a su misma esposa. Tanto así que dentro de su idioma se usa el vocablo maa para hacer referencia tanto a los hombres como a los bueyes.
Cuando es el día del casamiento, la mujer lleva su cabello rapado, a la vez que se adorna con toallas de varios colores y diferentes abalorios blancos. Ella camina desde la casa de su padre, hasta la casa de su futuro marido, quien para bendecirla debe escupir leche sobre su cuello.
Cuando el hombre ha bendecido a su esposa, el casamiento no tiene marcha atrás y si la mujer decide arrepentirse o volver sobre sus pasos esta se convertirá en una simple piedra.
A medida que la novia camina, las mujeres del pueblo la agasajan y regalan amínales como terneros y cabras. Al llegar a casa del novio, este le ofrece una calabaza para que beba leche agria, siendo este el punto máximo de la ceremonia pues la boda toma valor social.
Luego de que la boda se ha consumado, la mujer es considerada una posesión más dentro del patrimonio que tiene el hombre.
El hombre masai puede contraer nupcias con cuantas mujeres desee, pues se tolera la poligamia y la promiscuidad, aunque para tener tantas esposas debe ser capaz de mantenerlas a todas y dar a cada una su dote correspondiente.
No está mal visto cuando una mujer tiene relaciones sexuales extramaritales con hombres que sean de la misma edad del esposo, siempre y cuando este lo sepa y de su consentimiento, pues entiende que con los años no puede mantener satisfechas a todas sus mujeres.
La idea es que las mujeres se embaracen pronto, tras lo cual se deben suspender toda relación sexual hasta que el niño camino, de igual manera que los hombres no pueden entrar a la cabaña hasta 10 días luego del parto y no pueden comer en su casa hasta que el niño ande.
A pesar de todo, y aunque las mujeres más viejas gozan de una autoridad sobre las más jóvenes del harén, de igual forma deben soportar algunas humillaciones como por ejemplo, es tradición que la familia del novio reciba a la esposa con insultos y excremento.
Esto como una representación de la dura vida que debe enfrentar, por lo que debe fortalecer su carácter.
Además de esto las mujeres sufren una cosificación con los años, por lo que pueden ser “prestadas” por su marido a algún amigo que este de viaje en el pueblo y necesite satisfacer algún deseo sexual.
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Religión masai.
La religión de los masai se ve enfocada en creencias místicas que concierne a su gente, a su rebaño y a su dios. Las vacas, al igual que en la cultura india, son sagradas así como también lo es su tierra y los elementes que conciernen a su rebaño.
Tienen un gran amor por su rebaño, ya que es este el que los provee y cubre de todas sus necesidades, como leche, sangre, carne para comer, además de cuero y pieles para hacer su ropa.
La religión de la comunidad masai se basa en el monoteísmo y es austero. Su dios recibe el nombre de Ngai, y su creencia en este dios se basa en la capacidad que tiene para traer la lluvia a su región.
La hierba es considerada como un elemento sagrado natural, hasta el punto en que si un adulto va a golpear a un niño este puede librarse de la paliza en caso de conseguir arrancar un poco de hierba fresca.
En su religión, muy pocas personas son merecedores de tener una vida eterna luego de la muerte, razón por la cual a los cadáveres se les deja en campo abierto para que los carroñeros lo coman.
Las grandes personalidades se entierran en una tumba que no tiene mucha profundidad, mientras que la cabeza se le inclina hacia la casa y al lado de la tumba se colocan hierba, un bastón y unas sandalias.
Las personas “Laibon” tienen una tumba que se forma a partir de una pila de piedras; cada creyente que pasa por un lado coloca una nueva piedra sobre la tumba.
Está prohibido hablar sobre los muertos, y en caso de que se quiera hacer mención de algún familiar o conocido muerto se debe usar un sinónimo o apodo.
Se cree que las casas se contaminan si una persona muere dentro de ella, por esta razón si una persona enferma y está a punto de morir es expulsada no solo de su casa, sino también de la tribu quedando desprotegidos contra el ataque de las hienas que pueden comerla aun cuando la persona todavía este consiente.
Los jóvenes moran deben pasar por una ceremonia de iniciación que lleva el nombre de grupos de la circuncisión derecha y circuncisión izquierda. Para realizarla el joven debe ir con la cabeza rapada y limpia.
Esta ceremonia termina con el sacrificio de un buey para comer. Luego del rito el joven debe cortar un árbol que las chicas jóvenes deberán plantar al lado de su casa. Al tercer día de la ceremonia el joven se despierta muy temprano y se procede a circuncidar cuando sale solo.
Tras algunos días de un estado de convalecencia que debe pasar dentro de su cabaña, al momento de salir usa un delantal y unos zarcillos de mujer mientras se divierte tirándole flechas sin punta a los glúteos de las muchachas además de cazar pájaros para usarlos de sombrero hasta que el cabello crezca nuevamente.
Los que han pasado por la iniciación se reúnen para formar la “manyatta” para que estos nuevos guerreros puedan comenzar a luchar y robar el ganado de las sociedades vecinas
Una costumbre de las mujeres es la de vestirse con muchos collares, pulseras y zarcillos que ella misma ha elaborado usando perlas de colores. Tanto hombres como mujeres se hacen más grande el agujero de las orejas hasta tal punto que pueden introducir en el diferentes objetos como corchos y colmillos de animales.
Los hombres andan siempre con un palo o bastón que les sirve de apoyo para caminar y como medio para ahuyentar a los animales que los molesten.
Alimentación masai.
El pueblo masai puede clasificarse como una tribu de costumbres nómadas que se mantienen en constante movimiento sin vivir en un solo lugar. Cada cierto tiempo migran con sus casa y pertenencias para buscar nuevas tierras y alimento.
Esta tribu la conforman 350.000 pertenecientes a la cultura de África, especialmente en países como Kenia y Tanzania.
Para alimentarse consumen mantequilla, carne de cabras y antílopes, leche de vaca y sangre de animales. En momentos en que se sienten muy agotados y cansados suelen mezclar sangre de buey con leche para tomarlo como remedio casero.
Cuando cazan utilizan flechas que terminan en una punta de madera, que pueden afilar más si quieren que penetre más y produzca más daño, o pueden dejarlas un poco roma solo para lastimar a la víctima.
Idioma masai.
Estas personas hablan el idioma masai, siendo oeste una lengua que forma parte de la rama oriental del subgrupo nilótico, así como también es parte del grupo de lenguas sudánicas orientales enmarcadas dentro de las lenguas nilotico saharianas.
Los masáis usan su idioma para comunicarse dentro de la tribu, más para poder hablar con personas que no pertenecen a su misma tribu usan el suahili, una lengua común en Kenia, Tanzania y algunos de los estados vecinos. Los jefes de tribus saben hablar inglés.
Tienen desarrollada la escritura, pero no la utilizan pues las personas no saben leer ni escribir.
Vivienda masai.
El asentamiento donde los masai se instalan recibe el nombre de zamoras, siendo estos unos círculos formados por las chozas que se hacen de adobe y ramas que encierran el ganado.
Las chozas se construyen usando ladrillos hechos a partir de excremento de vaca, paja y barro este último elemento usado para impermeabilizar y endurecer la estructura.
Las paredes de la parte interior se alisan con barro y luego se ahúma para que el barro se endurezca. Aunque tiene pequeños tragaluces no cuentan con ventanas. (ver: arte bizantino)
Masáis en la actualidad.
Actualmente los masai atraviesan muchos problemas políticos y culturales que parten desde un problema con la territorialidad. Debido a un contrato firmado por el estado en el año de 1904 seguido de un segundo contrato que se firmó en el año 1911, las tierras masai en Kenia se vieron grandemente reducidas, hasta quedar solo un 40% de ella.
Esta reducción de la tierra fue por parte de la cultura inglesa, cuando los colonos británicos llegaron a esta tierra y expulsaron a las tribus para asentar sus ranchos.
Luego de la explosión, los masai se vieron confinados en los distritos que hoy se conocen como Kajiado y Narok.
Durante la década de los 40, los masai que habitaban en Tanzania se vieron desplazados de sus tierras fértiles del Monte Meru y el Monte Kilimanjaro e igualmente fueron expulsados de las tierras altas fértiles de Ngorongoro.
Como si no fuera poco, se les quito más tierra con la finalidad de hacer nuevas reservas de caza y parques nacionales como el caso de Amboseli, Parque Nacional de Nairobi, Masái Mara, Samburu, Lago Nakuru y Tsavo en Kenia; Manyara, Ngorongoro, Tarangire8 y Serengeti en Tanzania.
Los masai representan un ejemplo perfecto de como la globalización puede en algunos casos ser un mal, debido a que por artículos hechos por Garrett Hardin donde se enfatiza la “tragedia de las comunes”, así como escritos de Melville Herskovitz acerca “del complejo del ganado” ha sembrado en las mentes de autoridades políticas la creencia de que el tradicional pastoreo masai es un peligro para las zonas de pastoreo de la sabana.
Aunque estudiosos antropólogos han demostrado que este concepto es falso, aún sigue estando muy presente dentro del imaginario de las funcionarios y ecologistas que hacen vida en Tanzania.
Debido a esto, el gobierno tomó la decisión de sacar a la tribu masai de las inmediaciones del Parque Nacional de Serengeti para llevarlos a unas zonas que están alrededor de la Zona de Conservación de Ngorongoro o NCA.
Con este nuevo desplazamiento los masai se han visto en la obligación de tomar nuevas formas de subsistencia ya que la población de la tribu sigue creciendo y su ganado se pierde ya sea por enfermedades o por falta de tierras para ejecutar un pastoreo eficiente.
Muchas personas se han visto inmersas en una nueva técnica de alimentación que consiste en el cultivo del maíz y diversos productos, aunque esta práctica tiene una connotación cultural negativa. (ver: cultura de libia)
Las mujeres desplazadas de los da arashu y wa meru, casadas con hombres masai fueron las encargadas de introducir eta nueva estrategia de sostenimiento y producción.
Pero su situación tomo nuevamente un camino complicado luego de que en el año 1975 se prohibiera la practica agrícola dentro de la Zona de Conservación de Ngorongoro.
Debido a esta nueva prohibición han tenido que tomar parte dentro de la economía monetaria de Tanzania, vendiendo sus animales y su comida para poder tener comida.
Para el año de 1992 la prohibición fue retirada, convirtiéndose la agricultura nuevamente en una parte fundamental para que los masai logren su sustento. Sin embargo, las fronteras de los parques y la continua privatización de la tierra limitan todavía la zona para pastorear de los masai, por lo que han tenido que cambiar varias veces.
Un nuevo problema se ha sumado, pues los masai que habitan en Loliondo, al norte de Tanzania, deben soportar el acoso constante que tienen contra ellos las autoridades locales, quienes queman los poblados para que una empresa de caza la Otterlo Business Corporation se quede con la tierra. (Ver: cultura en vietnam)
